Viendo un capítulo de Por ella soy EVA, recordé algunas novelas con la misma trama donde por algún motivo el protagonista (hombre o mujer) se tiene que transformar y desaparecer para darle vida a al sexo contrario y así llegar a la vida del otro protagonista colándose como agua, ayudándole a hacerle la vida más fácil o sacándola de los problemas que la vida le pone.

Sin duda está telenovela sigue este patrón, Jaime Camil interpreta a EVA en donde su acercamiento es con la protagonista Lucerito, que después de dos años alejada de la pantalla chica regresa.

Jaime Camil ha sido gracioso por naturaleza en cada interpretación que realiza,  no creo que olvidemos su papel en la novela “La fea más Bella”, en está no es la excepción, con sus movimientos de manos exagerados, chistes malos, el tono de hablar y las  peripecias que hace con tal de estar con su amada Helena.

Vemos como se lleva a la pantalla el estereotipo de macho como buen mexicano, menospreciando a la mujer como un objeto que solo sirve para estar en casa, hacer comida, lavar ropa y que no tiene voz ni voto, así como desde pequeños se les inculca a los niños varones que no deben de colaborar en quehaceres del hogar ¿por qué? La respuesta es sencilla, por ser hombre, ¿y algunos creemos que los tiempos van cambiando? En algunos aspectos si, pero no en éste, como lo dije México es un país machista.

 También destacaré el papel del hombre seductor y sobre todo con poder que quiere conseguir a como de lugar lo que quiere donde de nuevo se le impone a la mujer el papel de sumisa, para llegar a un buen puesto no solo basta con tener la capacidad y el conocimiento sino que se debe dar el cuerpo para llegar a donde se quiere, acaso solo se le ve a una mujer como un objeto sexual, manipulable, sin sentimientos, derechos o con la aspiración de ser alguien sin tener que dejar la dignidad a un lado?

 Un punto más, el infiel, que tiene en casa a su mujer esperanzada y engañada mientras él se la pasa a gusto con su asistente.

Como la novela tiene una parte chusca, debe de tener a personajes que causen  risa, a mí, no sacan ni la sonrisa, vemos a dos personajes que nunca hacen nada, que se hacen los graciosos, hablan al mismo tiempo y ni se les entiende nada, los cuales siempre andan pegados y  ni trabajan, pero ellos juran  que colaboran en la empresa y claro si algo sale mal y al jefe no le gusta uno al otro se echan la pelota.

Quisiera ver algo diferente y no uno más de los refritos que saca Televisa, con tal de tener a la audiencia pegado al televisor, que al final de cuentas siempre sabremos en que terminará la historia.